Discurso del Presidente de la República de Azerbaiyán, Heydar Aliyev, en la inauguración del IV Congreso Internacional de Sociedades de Pediatría - Teatro Estatal de Ópera y Ballet de Azerbaiyán, 21 de septiembre de 1997


¡Nuestro querido amigo, hermano, estimado Ihsan Dogramachi!

¡Estimados dirigentes de la Asociación Internacional de Pediatría!

¡Estimados invitados, señoras y señores!

Les felicito de todo corazón con motivo del comienzo del trabajo del IV Congreso Internacional de Sociedades de Pediatría. ¡Les deseo éxitos en este trabajo honorable!

La celebración en nuestra república del IV Congreso Internacional de Sociedades de Pediatría, la reunión de los pediatras de los estados turcos percibimos como un gran interés y atención de las organizaciones internacionales por la República de Azerbaiyán. De nuestra parte, hemos aceptado con satisfacción la celebración de este congreso en Azerbaiyán y hemos hecho y haremos todo lo posible para garantizar el trabajo fructífero del congreso, aplicar plenamente las tareas planteadas. Espero que este congreso internacional realice un trabajo útil para la salud de los niños en los países de habla turca, en todo el mundo, para el tratamiento de enfermedades de la infancia, y dará recomendaciones y propuestas para el futuro. Esta es una gran necesidad. Los niños - el futuro de la humanidad. Los niños tienen un lugar especial en todos los países.

Estamos viviendo los últimos años del siglo XX. Viene el siglo XXI. Los niños que nacen hoy día, que aparece hoy en el mundo, los niños que están haciendo sus primeros pasos, en el siglo XXI, se abordarán los problemas del mundo, asegurarán la vida de la humanidad. Por lo tanto, esta esfera, es decir, la salud de los niños, el mantenimiento y la protección de la salud física y mental, es deber grande y sagrada de cada Estado. Así es como lo entendemos en la República independiente de Azerbaiyán. El Estado de Azerbaiyán, utilizando todas las posibilidades, ha tratado y va a tratar de garantizar asegurar y y proteger la salud de los niños.

Ahora nuestro país está en la situación difícil. Porque Azerbaiyán es uno de los puntos neurálgicos del mundo, uno de los países que experimentan período difícil en las guerras de la llama. Alabado sea Alá, ahora en el mundo no hay muchos puntos neurálgicos. Después de la terrible guerra mundial - la Segunda Guerra Mundial - ya 50 años, la humanidad en general vive en paz y tranquilidad. En algunos países desarrollados han abordado con éxito cuestiones sociales, incluida la salud infantil, se han creado todas las posibilidades que ellos crezcan en buenas condiciones, en un buen ambiente. Deseamos que estos países vivan mejor, felices. Al mismo tiempo, todos los saben que esta situación no existe en todas las partes, en particular en la región del Cáucaso, donde vivimos. La situación en Azerbaiyán es difícil y complicada. El principal factor que complica nuestra situación, es la agresión militar de Armenia contra Azerbaiyán, que se originó sobre la base de las reivindicaciones territoriales. La sangre derramada como consecuencia de esta agresión, las ciudades, aldeas saqueadas, las casas destruidas, las personas que se han convertido en mártires, inválidos - por desgracia, entre ellos también hay niños - es la realidad de nuestra vida moderna.

La agresión militar de Armenia contra Azerbaiyán comenzó en 1988. Como resultado de esta agresión, por razones obvias, las fuerzas armadas de Armenia han ocupado el 20 por ciento del territorio de la República de Azerbaiyán, más de un millón de azerbaiyanos fueron expulsados por fuerza de las tierras ocupadas, de sus casas, se convirtieron en los refugiados, la mayoría de ellos viven en las tiendas de campaña. Ellos son los que pudieron salvar la vida durante la agresión. Pero, decenas de miles de personas, defendiendo la tierra de nuestra patria, murieron, se convirtieron en mártires, se convirtieron en mártires y los niños. Entre los prisioneros también hay niños. Esta es una tragedia que ha asolado al pueblo azerbaiyano al final del siglo XX. Y el caso más terrible de esta tragedia es el genocidio de Jodzhali. El mundo sabe, y hoy todos los deben saber que el genocidio de Jodzhali es la exterminación de la gente en Jodzhali, que es un gran poblado de Azerbaiyán, se puede decir, es una de las páginas más terribles de la historia del siglo XX, y en general, de la historia de toda la humanidad, es un crimen más horrible. Aquí, no decimos sólo sobre la muerte de la gente. Estamos hablando de la muerte después de una brutal tortura, se trata de sus tormentos, estamos hablando de genocidio. Todo esto ha afectado el clima socio-político en Azerbaiyán, ha empeorado la situación social en nuestra república, ha causado un gran daño a la salud humana. También hay niños entre las personas sufridas. La mayoría de un millón de personas expulsadas por fuerza de sus casas, 400 mil de los refugiados que viven en tiendas de campaña, son niños. Esto es terrible.

Además de las medidas sociales, políticas, económicas, tenemos también las tareas muy grandes en el cuidado de la salud, incluso en el ámbito de la salud de los niños.

Tratamos de cumplir estas tareas. Los trabajadores de la salud trabajan con abnegación en Azerbaiyán. Los pediatras de Azerbaiyán están tratando de cumplir adecuadamente con su trabajo. Por nuestra parte, como Estado tomamos las medidas necesarias para la realización más organizada de este trabajo. Pero todo esto no puede sanar nuestras heridas. Estas heridas, en un sentido literal, son las heridas físicas y morales. Al mismo tiempo, son las heridas espirituales causadas a nuestro pueblo. Por lo tanto, la celebración en nuestra república de este congreso internacional es muy importante para nosotros, para Azerbaiyán.

Los médicos, pediatras que participan en este foro internacional, por un lado, con sus experiencias, conocimientos pueden ayudar a los trabajadores de salud, los pediatras de nuestra república. En general, del trabajo de este congreso esperamos los resultados efectivos. Por otro lado, muchos invitados llegaron en Azerbaiyán - médicos, pediatras - ellos nos pueden ayudar en informar a la comunidad mundial y las organizaciones internacionales de salud, el UNICEF y todas las organizaciones internacionales, sobre las dificultades, los problemas de la vida de hoy de nuestro país. Espero que podamos ver los resultados de esta ayuda.

Más de tres años hemos podido guardar el alto el fuego en el conflicto que continúa entre Armenia y Azerbaiyán. Se firmó un acuerdo del alto el fuego entre Armenia y Azerbaiyán, y nosotros observamos el acuerdo. Hemos firmado el acuerdo porque Azerbaiyán no quiere la guerra, el pueblo azerbaiyano es un pueblo pacífico, el pueblo azerbaiyano desea poner fin a este conflicto y arreglarlo pacíficamente. Hemos sufrido un gran daño, fueron matados nuestros ciudadanos, 400 mil niños viven en las tiendas de campaña en la situación de los refugiados. A pesar de esto, hicimos un paso de paz y observamos el alto el fuego, lo guardamos y esperamos que el problema sea arreglado pacíficamente. Para esto tomamos todas las medidas posibles, los pasos constructivos.

Las decisiones adoptadas en los últimos años en las organizaciones internacionales, en particular, en la Cumbre de Lisboa de la OSCE en diciembre del año pasado, muestran que nuestras iniciativas, pasos, dados para el arreglo pacífico del problema, dan resultados positivos, y este proceso se desarrolla. Tenemos una esperanza muy grande. En las recientes conversaciones con los jefes de los países que son los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE - Presidente de los Estados Unidos, señor Bill Clinton, Presidente de la Federación de Rusia, señor Boris Yeltsin, Presidente de la República de Francia, señor Jacques Chirac - he venido a la conclusión de que efectivamente, los líderes de estos países tratan y tratarán de poner fin a este conflicto. Ellos quieren una solución pacífica del conflicto. Tenemos una esperanza muy grande.

Pero al mismo tiempo, el daño, causado a Azerbaiyán en el conflicto se manifestará durante muchos años. Debemos realizar mucho trabajo para eliminarlos, incluida asegurar la salud de los niños. Por supuesto, los niños que viven en tiendas de campaña como refugiados, necesitan mayor cuidado y atención.

Todo el mundo debe saberlo. Imagínense usted una familia que 4-5 años vive en tiendas de campaña, y en el invierno riguroso, y en el verano caluroso. Protegida del frío, de la enfermedad, las personas siguen viviendo en tiendas de campaña, crean familias y tienen hijos. Las mujeres se ven obligadas a dar a la luz en tiendas de campaña. Pero hace diez años en Azerbaiyán, las mujeres daban a la luz en las maternidades. En el pasado, las mujeres dieron a luz en casa, pero luego se salvaron de esto. Porque en Azerbaiyán fueron construidas las maternidades grandes. Ellos existen y hoy día. Pero, por desgracia, las familias que viven en tiendas de campaña, no pueden utilizar esta posibilidad. Esto es la realidad de nuestra vida, los momentos difíciles del camino recorrido por nuestro pueblo. Pero nuestro pueblo es paciente. Nuestro pueblo sufre todo esto. Sufre porque cree en un futuro feliz de Azerbaiyán. Sufre porque la independencia estatal y la libertad nacional de Azerbaiyán son para todos los ciudadanos de Azerbaiyán por encima de sus intereses personales. Soportamos y vamos a soportar todas estas dificultades en nombre de este gran logro histórico, en nombre de la existencia de Azerbaiyán como un Estado independiente, en nombre de la preservación de nuestra libertad nacional. Creo que nuestro pueblo también cree a un futuro feliz de Azerbaiyán. Creo que los niños nacidos hoy, crearán el futuro brillante de Azerbaiyán en el siglo XXI, y el pueblo azerbaiyano vivirá en libertad en su Estado independiente.

Y para lograr todo esto, los trabajadores de salud deben cumplir más tareas. Los médicos, trabajadores de la salud, incluidos los pediatras, tienen una profesión muy honorable. La profesión médica es más respetada y creíble en la sociedad. Las personas que se han dedicado a la profesión médica, la curación, son las personas felices. Porque la sociedad siempre tiene necesidad de ellos. Al mismo tiempo, los médicos traen alegría, paz, tranquilidad. Ellos trabajan en nombre de salud de la gente. Los médicos por su profesión están en contra de la guerra, no quieren el derramamiento de sangre. Por lo tanto, las actividades de los médicos, los trabajadores de la salud son muy importantes y son necesarios y para proteger la salud de nuestra sociedad, y para crear la paz y tranquilidad.

Nuestro país tiene problemas interiores y exteriores. El problema exterior es lograr el cese de la agresión militar de Armenia, lograr la paz en la región y vivir en paz con todos los países vecinos. El problema interior es la construcción en Azerbaiyán un Estado democrático, jurídico, laico, la creación de la vida feliz para cada ciudadano de nuestra república y el mejoramiento sus condiciones de vida. Por lo tanto, siempre debemos mantener la estabilidad política y social en Azerbaiyán, no debemos permitir las discordias, los desórdenes en la república. En el pasado reciente, junto con la agresión extranjera en Azerbaiyán, en nuestro país había una confrontación, discordias, luchas, batallas y derramamiento de sangre. Los médicos tienen un potencial muy grande para para eliminarlos. Repito que los médicos por su profesión nunca quieren la guerra, los enfrentamientos y conflictos.

La profesión médica requiere la lealtad a su pueblo, profesión. En cualquier profesión no hay juramentos como el Juramento Hipocrático. Todos los médicos que le dio el Juramento Hipocrático, siempre debe ser fiel a este juramento. Espero que los trabajadores de salud, los médicos de Azerbaiyán, especialmente ahora, en Azerbaiyán independiente, siempre deben recordar el Juramento Hipocrático, nunca deben olvidarlo.

A pesar de la situación difícil de Azerbaiyán, en nuestra república, se puede decir, fueron sanadas por completo las enfermedades infecciosas. En Azerbaiyán no hay enfermedades infantiles terribles - aquí han señalado de esto. Todo esto se realiza en condiciones difíciles - a veces en condiciones de escasez de medicamentos, la falta de instrumentos médicos necesarios a las instituciones de salud, la falta de fondos. Todo esto se ha realizado durante las reformas en la esfera de la salud. Por eso, el curar y prevenir enfermedades terribles en la República de Azerbaiyán en este período difícil y la lucha decidida con las enfermedades en su fase inicial son dignos de atención. Aprovechando la ocasión, quiero expresar mi agradecimiento a todos los trabajadores de la salud de Azerbaiyán, y quiero expresar mi seguridad de que ustedes y después de esto seguirá trabajando desinteresadamente en este camino.

Quiero señalar que la celebración el IV Congreso Internacional en Azerbaiyán es un gran acontecimiento en nuestra vida socio - política. Espero que este Congreso dé buenos resultados. Deseo que los pediatras, todos los trabajadores de la salud de Azerbaiyán, establezcan buenas relaciones profesionales con los distinguidos invitados que han llegado a nuestra república, y que estas relaciones sigan desarrollándose. Esta es una de las ramas de las relaciones de Azerbaiyán con el mundo en todas las esferas. Deseo que estas relaciones profesionales contribuyan al desarrollo de la pediatría en Azerbaiyán. Creo que ese apoyo será.

Una vez más expreso mi agradecimiento a los organizadores de este congreso internacional. Les felicito con motivo del comienzo del congreso, deseo éxitos en su trabajo. Espero que los médicos, trabajadores de la salud, con su profesión siempre luchen por la paz, no escatimen sus esfuerzos para establecer la paz en todo el mundo, incluso en la región del Cáucaso, en Azerbaiyán.

Les deseo la salud, la felicidad, los éxitos en todos sus asuntos.

"Heydar Aliyev: Nuestra independencia es eterna" (discursos, declaraciones, entrevistas, cartas, arengas, decretos) - Azerneshr, Bakú - 2004, v. 12, p. 166.

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