Discurso del Presidente de la República de Azerbaiyán, Heydar Aliyev, en la recepción oficial, organizada con motivo del 10º aniversario de la independencia estatal de Azerbaiyán - 18 de octubre de 2001

¡Estimados señoras y señores!

¡Estimados embajadores!

¡Estimados invitados!

De todo corazón les felicito con motivo del 10º aniversario de la independencia estatal de Azerbaiyán, deseo salud, larga vida, felicidad y éxitos a todos los ciudadanos de Azerbaiyán en todos nuestros trabajos futuros.

Para cada pueblo, cada nación no hay nada más dulce y costoso como libertad e independencia. En el siglo XX, muchos pueblos del mundo han logrado su libertad, independencia. La Primera Guerra Mundial, la Segunda Guerra Mundial cambiaron por completo el mapa del mundo. Fueron liberados decenas de pueblos que estaban en condiciones coloniales.

Cuando, después de la Segunda Guerra Mundial se creó la Organización de las Naciones Unidas, había cerca de 50 miembros. Ahora 200 Estados son miembros de las Naciones Unidas. Miran cuantos pueblos, naciones durante el período históricamente breve consiguieron la libertad nacional, crearon los Estados independientes y ahora están representadas en las organizaciones internacionales, son miembros de las Naciones Unidas.

Al final del siglo XX, es posible más tarde que otros, pudimos conseguir nuestra independencia estatal. Es cierto que las páginas de la historia demuestran que el pueblo azerbaiyano declaró su independencia todavía en 1918, construyó su Estado, comenzó a vivir independientemente. Pero, después perdió la independencia. En 1991, en relación con el colapso de la Unión Soviética, todas las repúblicas de la Unión Soviética, declararon su independencia y entraron en la comunidad mundial como Estados independientes.

Después de haber aprobado el 18 de octubre de 1991 la Ley Constitucional de la independencia de nuestro país, declaramos a todo el mundo que Azerbaiyán es un Estado independiente. Ya, diez años vivimos como Estado independiente. Durante estos años pasamos un camino muy difícil y glorioso. Somos miembros de pleno derecho de la Organización de las Naciones Unidas. Somos miembros de todas las organizaciones internacionales del mundo. En fin, a principios de este año también hemos entrado en una de las organizaciones internacionales autorizadas en el mundo - el Consejo de Europa. Estamos orgullosos de todo esto, y nuestro pueblo tiene el derecho de estar orgulloso. Sin embargo, un sentido de orgullo para nuestra nación añade que nuestro pueblo ya es libre, es dueño de su destino, que la firma del pueblo azerbaiyano hay entre las firmas de los pueblos del mundo. Azerbaiyán que ya diez años es un Estado independiente, pasó este examen.

Celebramos con solemnidad estos diez años. Ya durante varios días, quizás meses, en las ciudades, los distritos, los pueblos, las empresas, las universidades, las diferentes organizaciones el pueblo azerbaiyano celebra con el sentido de orgullo el 10º aniversario de la independencia estatal de Azerbaiyán. De ese modo, cada ciudadano de Azerbaiyán, todo el pueblo azerbaiyano se alegran de esto. Esto es la alegría no sólo de una persona, una familia, pero la alegría y la fiesta más preferida de todo el pueblo azerbaiyano, todos los ciudadanos de Azerbaiyán.

Estoy absolutamente convencido de que durante diez años, pasando un gran, difícil camino, pudimos defender y guardar nuestra independencia, pudimos fortalecerla, construir en Azerbaiyán un Estado independiente, democrático, de derecho, crear todas las instituciones de este Estado, esto muestra que pudimos crear una base solida, fuerte para el futuro de Azerbaiyán. Se realizó la primera parte, la parte más difícil de nuestra misión.

Pero tenemos todavía un deber ante nuestro pueblo. Nuestro deber es más desarrollar de Azerbaiyán como Estado independiente, hacer Azerbaiyán más fuerte, para que la independencia de Azerbaiyán traiga la felicidad a cada uno de los ciudadanos. Tenemos grandes tareas. Pero es alentador que la mayoría de nuestros ciudadanos son conscientes de estas tareas, las reciben y tratan de cumplirlas. Nosotros - los órganos estatales, órganos de poder de Azerbaiyán, sentimos esta responsabilidad más de todos los ciudadanos de Azerbaiyán. Ustedes pueden estar seguros de que cumpliremos nuestras tareas con más responsabilidad, honestamente para asegurar el futuro feliz de nuestro pueblo, su independencia eterno.

Durante estos diez años, nos hemos reunido por primera vez en esta reunión con motivo de esta ceremonia. Tales deseos también surgieron en el pasado, pero tomando en consideración de mucho, yo pensé que todavía era temprano. Pero, ahora estos diez años están por detrás.

Al felicitar a ustedes con un sentimiento de gratitud, al mismo tiempo recuerdo nuestros mártires que sacrificaron sus vidas por la integridad territorial, la independencia de Azerbaiyán. Felicito a las familias de los mártires. Hoy, ellos también deben estar orgullosos que sus hijos, hermanos, hermanas, cabezas de familia murieron por la patria, la nación, sus tierras, murieron por la independencia de Azerbaiyán, que la memoria de ellos vivirá siempre, estará en nuestros corazones.

Felicito a todos los que demostraron heroísmo, fueron heridos y se convirtieron en discapacitados. Tratamos de normalizar su vida. Que se curen sus heridas. Pero creo que sus heridas son las heridas de todo nuestro pueblo. Estoy absolutamente seguro de que las heridas de nuestro pueblo, las heridas de las personas que defendieron la patria, se curarán, y nuestro pueblo se liberará de estas desgracias.

Felicito a las personas distinguidas de nuestro país, los hombres de ciencia, cultura, arte, todos los que trabajando de buena fe, con honestidad en la administración pública fortalecen nuestro sistema estatal. Felicito a los soldados de Azerbaiyán, felicito al ejército de Azerbaiyán. Felicito a nuestros hijos que ahora están de guardia del territorio de Azerbaiyán, están en las trincheras. Su servicio siempre será apreciado. Estoy seguro de que para cada joven azerbaiyano es un gran honor estar de guardia de su patria. Felicito a todos ustedes, felicito al pueblo azerbaiyano.

¡Felicidades!

¡Les deseo salud!

¡Que sus caminos sean claros!

¡Gracias, brindo por su salud!

Ayer celebramos una gran ceremonia, pronunciamos las amables palabras. Quiero que todos se sienten libres aquí.

Periódico "Azerbaiyán", 19 octubre de 2001.