Declaración del Presidente de la República de Azerbaiyán, Heydar Aliyev, en la reunión de los Jefes de Estado de la CEI - Ashjabat, 24 de diciembre de 1993


El continuó durante casi seis años de la agresión de Armenia contra Azerbaiyán ha causado sufrimientos indecibles al pueblo de Azerbaiyán.

Después del colapso de la Unión Soviética, cuando Azerbaiyán y Armenia obtuvieron su independencia, el conflicto entre estas repúblicas se convirtió en un conflicto militar entre estados.

Las fuerzas armadas de la República de Armenia han ocupado cerca de 14,0 mil metros cuadrados del territorio de Azerbaiyán, de los cuales más de 9,0 mil metros cuadrados están fuera de la región de Nagorno Karabaj. Cabe señalar que las fuerzas armadas de Armenia, controlando el territorio de Nagorno Karabaj, han ampliado su agresión, han ocupado fuera Nagorno Karabaj de las regiones de Lachin, Kalbajar, Agdám, Fizuli, Jabrail, Kubatli, Zanguelan y una parte de la región de Gazakh de la República de Azerbayán. Las operaciónes militares se acompañan con la exterminación en masa de civiles, la limpieza étnica en los territorios ocupados y la destrucción.

Durante el período de la agresión contra Azerbaiyán más de 18 mil personas fueron matados, cerca de 50 mil personas fueron heridos o se hicieron inválidos, 4 mil personas cayeron prisioneros o cogieron rehenes, cerca de 1 millón de azerbaiyanos se quedaron sin techo, durante la agressión fueron quemados, saqueados y destruidos más de 100 mil edificos habitables, más de 1 mil instalaciones económicas, más de 600 escuelas y centros médicas; de los territorios ocupados transportaron a Armenia los bienes públicos y privados en cientos de millones de dólares. Todo esto ha creado una situación crítica en Azerbaiyán.

Con gran pesar debemos señalar que en septiembre de 1993 Azerbaiyán se convirtió en miembro de pleno derecho de la Comunidad de Estados Independientes y se unió al Tratado de Seguridad Colectiva, pero la República de Armenia no sólo no cesó su agresión, por lo contrario las operaciones militares se ampliaron. A pesar del acuerdo de alto el fuego, además de las regiónes ocupadas de Lachin, Kalbajar, Agdám y una parte de Gazakh, en octubre-noviembre de este año las fuerzas armadas de la República de Armenia ocuparon y Fizuli, Jabrail, Kubatli y Zanguelan de Azerbaiyán. Por lo tanto, el agresor ocupó a la frontera estatal de Azerbaiyán con la República Islamica de Irán y creó un peligroso foco de tensión en las fronteras meridionales de la CEI, amenaza con hacer que el conflicto tenga carácter internacional.

La ocupación en octubre de 1993, de las regiones donde habían vivido más de 300 mil personas, fue percibida dolorosamente por el pueblo azerbaiyano porque esto ocurrió después de que Azerbaiyán se unió a la CEI y al Tratado de Seguridad Colectiva. Así, la República de Armenia no sólo continua la agresión contra la República de Azerbaiyán, pero también demuestra el total desprecio por los principios que unen a nuestra Comunidad.

Es inaceptable que la República de Armenia que es el país-miembro de la CEI y el participante del Tratado de Seguridad Colectiva y hace una agresión contra otro Estado, que también es el miembro de pleno derecho de la Comunidad - la República de Azerbaiyán.

Los acontecimientos en últimos días, confirman una vez más los objetivos agresivos de Armenia. Los intentos de las fuerzas armadas del agresor de avanzar en dirección a Beylagan en el territorio de Azerbaiyán, donde a lo largo de todo el camino instalaron los habitantes civiles expulsados de las zonas anteriormente ocupadas, y crea una nueva amenaza, aún más sangrienta escalada del conflicto. Durante la ofensiva el enemigo usa decenas de tanques, cohetes y artillería pesada y esto muestra la intensidad de las operaciones militares.

La República de Armenia, haciendo caso omiso de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, los esfuerzos de mediaciones de la OSCE, de Rusia, Kazajstán, trata de convencernos del reconocimiento de los armenios de Nagorno Karabaj como parte del conflicto con el fin de ocultar su verdadero papel - el papel del país que realiza la agresión frontal. De hecho, más de 100 mil armenios que viven en la región de Nagorno Karabaj, sin ningún tipo de recursos importantes, no son capaz de hacer las operaciones militares a gran escala contra el país con una población de 7 millones y ocupar el 20 por ciento de su territorio. Intentan menospreciar los derechos de 50 mil azerbaiyanos de la región de Nagorno Karabaj de la República, que como consecuencia de la limpieza étnica fueron expulsados de las regiones de Shusha, Jodzhali, Khojavend, Gadrut y Agdere.

Por desgracia, la experiencia reciente muestra que la indecisión, el inaceptable equilibrio entre los intereses del agresor y su víctima no sólo fueron tolerados, pero también amenazan violar la paz en toda la region de Cáucaso y extender el conflicto fuera de las fronteras de la CEI. Todo esto obliga a los países de la CEI que firmaron el Tratado de Seguridad Colectiva, a tomar en serio las causas y consecuencias de la agresión armenia contra Azerbaiyán. Cabe señalar que lo que está sucediendo tiene relación no sólo con nuestra región, pero también con todo el espacio de la CEI.

Con este fin ofrecemos elaborar en el nivel de expertos un sistema de acuerdos bilaterales y multilaterales dirigidos a estabilizar la situación política en todo el espacio de la CEI. Estas enmiendas son siguientes.

- el reconocimiento y respeto a la soberanía e integridad territorial de cada uno de nuestros Estados miembros de la CEI. Como un primer paso es necesario concluir los acuerdos regionales sobre el reconocimiento mutuo de las fronteras, por ejemplo, de Asia Central, el Cáucaso;

- la seguridad, la defensa de los derechos y los libertades de los minorias nacionales en nuestros países, lo que creará una barrera sólida al separatismo y el naciónalismo militar.

Expresando una protesta contra tales acciones de la República de Armenia lanzo un llamamiento a los Jefes de Estado:

1. Valorar políticamente la agresión de la República de Armenia contra la República de Azerbaiyán;

2. Exigir la República de Armenia cesar las operaciónes militares contra la República de Azerbaiyán;

3. Retirar inmediatamente todas las fuerzas armadas de la República de Armenia del territorio de la República de Azerbaiyán;

4. Exigir de la República de Armenia dar garantías políticas firmes para evitar la reanudación de las operaciones militares. Sin esto no es posible el regreso seguro de los refugiados y personas desplazadas a sus regiones;

5. Crear una comisión especial de representantes de los Estados - miembros de la CEI para determinar el daño material y apreciar los actos delictivos de los ocupantes en el territorio de Azerbaiyán.

Sin la aplicación práctica de estas propuestas no es posible llegar a la paz, crear las condiciones para la cooperación económica mutuamente beneficiosa, sin la cual no puede haber ni progreso, ni democracia, ni siquiera la existencia de nuestra Comunidad.

También hemos hecho enmiendas al texto del Tratado de Seguridad Colectiva, cuyo objetivo es crear un mecanismo de respuesta de emergencia a las actuales situaciones y posibles en el futuro que puede ofrecer peligro para la seguridad de la Comunidad. Nuestra convicción es así que la seguridad de los Estados de la Comunidad más depende de la estabilidad y la paz en nuestra casa comun, de la seguridad de las fronteras exteriores.

Periódico "Azerbaiyán", el 25 de diciembre de 1993.